El señor ha querido concretar la profecía de Daniel indicándonos la
familia en que tendría lugar el cumplimiento de esta profecía por la que nos
avisa de la creación del quinto imperio: En la aparición que tuvo el primer rey
de Portugal, D. Alfonso Henríquez y que declaró bajo juramento, manifestó el
Señor su voluntad de crear un imperio en su descendencia. Por este motivo D.
Sebastián decía que el no había nacido para rey sino para emperador pues creía
que se había de materializar dicho imperio en él que era el décimo sexto
descendiente de D. Alfonso Henríquez a quien aludía la profecía. Esta decía
según juró D. Alfonso Henríquez:
"Eu
Dom Afonso Rei de Portugal, (...) juro por esta cruz de metal (...) Eu estava
com meu exército nas terras de Além Tejo, no Campo de Ourique, para pelejar com
Ismael e outros quatro reis dos mouros, que tinham consigo infinitos milhares
de homens. E a minha gente atemorizada com esta multidão, estava enfadada (...)
E eu triste por aquilo que ouvia, comecei a cuidar comigo que faria; e tinha um
livro na minha Tenda, no qual estava escrito o Testamento Velho (...) e li nele
a vitória de Gedeão (...) adormeci sobre o Livro, e logo vi um Velho, que me
dizia: Afonso, confia, porque viverás e desbaratarás estes Reis (...) e o
Senhor se te há-de mostrar. Estanto eu vendo isto, chegou-se a mim João
Fernandes de Sousa (...) e disse-me: "Senhor, levantai-vos, está aqui um
homem velho que vos quer falar (...) E entrado ele onde eu estava, conheci ser
aquele mesmo, que eu tinha visto na visão. O qual me disse: Senhor, vencerás,
vencerás e não serás vencido. És amado do Senhor, porque sobre ti e sobre teus
descendentes depois de ti, tem posto os olhos de sua misericórdia até à décima sexta geração, na qual se
diminuirá a descendência, mas na mesma assim diminuída, o mesmo Senhor tornará
a pôr os olhos e verá.(...) esta noite (...) sairás do teu arraial, só e sem
companheiros, e mostrar-te-á a sua piedade. (...) Então armado com a espada, e
escudo, saí do arraial, e vi subitamente para a parte direita contra o Oriente
um raio resplandecente (...) logo no mesmo raio mais claro que o sol, vejo o
sinal da Cruz e Jesus Cristo nela crucificado (...) humilhado me lancei em
terra (...) Vós a mim Senhor? (...) O Senhor (...) me disse: Não te apareci
desta maneira para te acrescentar a Fé, mas para fortalecer o teu coração neste
conflito e para estabelecer e confirmar sobre firme pedra os princípios do teu
Reino. Confia, Afonso, porque não somente vencerás esta batalha, mas todas as
outras (...). Tua gente acharás alegre para a guerra e forte, pedindo-te que
com nome de Rei entres nesta batalha com título de Rei. Não duvides, mas
concede-lhe liberalmente o que te pedirem.
Porque Eu sou o que faço e desfaço Reinos
e Impérios. E a minha vontade é
edificar sobre ti e sobre a tua geração
depois de ti, um Império, para que o meu Nome seja levado a gentes
estranhas. E porque os teus sucessores conheçam quem te deu o Reino, fabricarás
teu escudo de armas com a divisa do preço, com que Eu comprei o género humano,
e com que eu fui comprado dos Judeus. (...)
Não se apartará deles, nem de ti alguma hora minha misericórdia, porque por
eles tenho aparelhado para mim grande sementeira, porque os escolhi para meus
semeadores para terras mui apartadas e remotas. (...) E eu, cheio de
confiança e suavidade, tornei ao exército.(...) Pelo que mando a meus
sucessores, que tragam por divisa e insígnia, cinco escudos patidos em cruz,
por amor da cruz e das cinco chagas de Jesus Cristo, e em cada um trinta
dinheiros de prata, e em cima a serpente de Moisés.(...) E esta será a divisa
da nossa nobreza em toda nossa geração. E se algum outra coisa intentar, seja
maldito do Senhor e com Judas traidor atormentado no inferno. Feita em Coimbra
a vinte e oito de Outubro, da Era de Cristo mil cento e cinquenta e dois."
Como vemos
el Señor, en esta revelación que hace a D. Alfonso Henríquez, le dice que ha de
fundar un imperio: “sobre ti y sobre tus descendientes”... Portugal fue junto a
Castilla la nación que llevó la fe de Cristo a todos los confines de la tierra.
Hoy puede decirse que las fronteras del catolicismo, el pueblo de los santos
del Altísimo, es la frontera que en la historia fijaron Portugal y Castilla, y
este pueblo cristiano será el germen del futuro imperio a que alude el Señor en
la revelación transcrita y la base sobre la que se edifique en un futuro el quinto
imperio de la tierra que señalará el triunfo definitivo del Señor.
El
catolicismo es el pueblo de los santos del Altísimo, es el heredero de las
promesas, es el nuevo Israel, porque es el único pueblo de la tierra que ha
sido obediente a lo largo de la historia al Señor que en la transfiguración
señala a su Hijo amado y ordena: “escuchadle” y tras escuchar sus mandatos los
ha puesto en practica obedeciendo a la Virgen Santísima
cuando dice en Caná: “haced lo que Él os
diga”. Y esta obediencia a los mandatos del señor ha llenado el Cielo de
Santos, confesores y mártires.
El
nacimiento del quinto imperio se ha ido formando paulatinamente desde que se
produjo la revelación del señor a D. Alfonso Henríquez pues cada vez que un
cristiano acepta los mandatos de Cristo se convierte en un hijo sobre el que ya
impera el Señor. Con la propagación del Catolicismo por los misioneros de
Portugal y Castilla, se ha extendido geográficamente el catolicismo hasta los
confines de la tierra. Con posterioridad se producirá, en el tiempo, la
culminación y manifestación pública y solemne a nivel mundial de este imperio
cuando se restaure la Casa de Avis en su trono de Portugal y sea derrotado
militarmente el anticristo que en esa generación intentará destruir a la
Iglesia y a sus hijos.
Con la
instauración de este imperio tendrán cumplimiento todas las profecías del
Antiguo Testamento que aluden a este reino temporal del Mesías, que al no
haberse realizado en Cristo hizo que el pueblo judío en su mayoría rechazase a
Jesús como el Mesías esperado. Como ya estamos en el tiempo de las Naciones[1]
que nos señala el Evangelio como el tiempo en que el pueblo de Israel vuelva a
la fe, al haberse recuperado Jerusalén,
es de esperar que el nacimiento del quinto imperio de Daniel esté
próximo, esté a las puertas de la historia.
Pero para llegar a ese Reino
futuro antes hay que pasar por una
previa purificación que viene avisada por los profetas en la Sagrada Escritura
en innumerables ocasiones bajo el nombre del día de Yahvé, de la gran
tribulación, del juicio de las naciones etc. Los Sumos Pontífices vienen
advirtiéndonos todos ellos que el mundo, por sus pecados, camina hacia una gran
catástrofe, pues no puede ofenderse impunemente al Señor. Las profecías
privadas nos avisan también de la proximidad del Reino y, antes, del castigo o
purificación.
Vamos a ver, en primer lugar lo que entendemos por profecía y su valor
testimonial. A continuación veremos algunas de las innumerables profecías con
las que el Señor nos ha dado avisos a lo largo de la historia donde nos ha
hablado del juicio de las naciones o día de Yahvé como purificación previa para
que se manifieste el Reino.
Julio,
ResponderEliminarhermano en Cristo,
soy Portugués. Seminarista.
Sólo quiero agradecerte el blog, tus publicaciones.
Seguiré leyendo.
Rezamos.
Julio,
ResponderEliminaré possível saber a fonte do texto do Rei D. Afonso Henriques?!
Joao Pedro
ResponderEliminarHay muchas fuentes donde encontrar el Juramento:
Monarchia Lusitana, Tomo III pag. 127
A ediçao principe deste Juramento do rei Dom Afonso Henriques foi realizado na 2ª impresao de Diálogos de Vária História de Pedro de Mariz, em 1597, tendo por base una cópia do cartório do Mosteiro de Alcobaça.
Te recomiendo leer mi blog: Sebastián I una vida apasionante y mi blog: Sebastianismo.
Te agradezco tus oraciones, que Dios te bendiga
Julio
Yo soy latinoamericano; y habiendo estudiado en españa me sorprendió la impiedad y apostasía generalizada del pueblo ( lleno de presuncion y arrogancia x lo demás). Sin embargo Portugal es otra cosa..no está el pueblo tan contaminado en su espíritu como el español...Conserva Portugal lo mejor del espíritu Hispano.
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